Evita el enojo... Una persona enojada fácilmente da rienda suelta a su ego, la gente manipuladora usa el enfado para intimidar, usan la máscara del enojo para esconder infidelidades y traiciones, no quieren ser cuestionados y se lavan las manos como Pilatos haciendo todo un berrinche para hacer sentir culpable a la persona afectada por su mala conducta.
Oremos: Si
el enojo ataca tus emociones, “cierra tus ojos, respira profundo,
sostén un poco el aire y suéltalo mientras oras: “En el nombre de
Jesucristo, desato mi espíritu, mi alma, y mis emociones de todo
enojo, me arrepiento de mis pecados y acepto que mis culpas. Gracias Padre
por tu gracia santificadora en Jesucristo, ayúdame a renovar mi forma de
pensar, de hablar y de actuar para ser una persona justa, te lo pido en el
nombre de Jesucristo. Amen.